Rudolph a la plancha

Después de más de una semana planeando la cena, ayer por fin encontramos el hueco. Y es que, aunque parezca mentira, no es tan fácil encontrar tiempo para ir al super a pillar todos los ingredientes y encima, elegir una noche en la que pudiesemos. Pues eso, a Freckles se le antojó probar la carne de reno, y yo, no sé por qué, dije que sabía cocinarla. Yo? cocinar? jajaja sí, claro. Bueno, la cena salió mejor de lo esperado, nada se quemó y seguimos vivas, que es lo importante. Pero claro, cuando una persona no es mucho de comer carnes, la carne de reno le puede parecer fortísima. Vaya, con lo buena que está (y encima que le eché como media botella de vino a la sartén...).

Y esta noche también cenamos juntas. Esta vez toca comida americana, unas sloppy joes como las que comía hace 9 años. Y me tiene que enseñar a hacer cookies, que la otra vez le salieron buenísimas. De hecho pedí a mis padres que me mandasen un paquete con "kisses" de chocolate expresamente para que me enseñe, que aquí no tienen de esas cosas. Por cierto, en el paquete, entre otras cosas, me han llegado las vitaminas (ya no voy a estar zombie todo el día!!), leche condensada (que me la estoy tomando ya en LaOfi) y pipas gorditas y saladitas. Se admiten más paquetes! ;)